Los Neurodatos: el nuevo horizonte de la privacidad y la protección de datos personales (I)
El principio de minimización obliga a tratar solo los datos personales necesarios, adecuados y pertinentes para la finalidad prevista, evitando cualquier recopilación excesiva.
Los llamados neurodatos son información obtenida del cerebro y sistema nervioso que revela emociones, pensamientos o decisiones.
Su carácter único convierte estos datos en una categoría especialmente sensible, ya que pueden identificar de forma inequívoca a una persona y revelar aspectos íntimos de su identidad cognitiva y emocional.
El documento conjunto de la AEPD y el EDPS (Supervisor Europeo de Protección de datos) advierte que el tratamiento de neurodatos plantea riesgos inéditos para derechos como la privacidad, la integridad mental o la dignidad humana. En contextos no médicos, como la educación, el entretenimiento o el neuromarketing, el uso de estas tecnologías, implican una recolección masiva y continua de información cerebral sin un fin estrictamente justificado.
La integración de inteligencia artificial en el análisis de neurodatos amplifica los riesgos: se pueden dar sesgos discriminatorios o usos no consentidos que den dar lugar a graves violaciones de los derechos de las personas.
En este sentido, los expertos europeos subrayan que cualquier tratamiento de neurodatos debe someterse a una evaluación ética y jurídica rigurosa, priorizando siempre la minimización y la transparencia en este tipo de tratamientos.
El principio de minimización obliga a tratar solo los datos personales necesarios, adecuados y pertinentes para la finalidad prevista, evitando cualquier recopilación excesiva.